Facatativá, graves consecuencias de la temporada de lluvia

Una abundante nubosidad se ha reportado en distintas zonas del país, lo que trae consigo una temporada de fuertes lluvias. En nuestra ciudad, el panorama no suele ser favorable, pues las inundaciones en barrios aledaños a fuentes hídricas y la caída de arboles han develado la ausencia de la formulación, seguimiento y evaluación de políticas, estrategias, planes y programas que deben realizarse para mitigar cualquier situación que genere riesgo para la población.
Es notorio que nuestra Facatativá no se encuentra preparada para asumir este tipo de situaciones, ya que hemos visto como una administración municipal se ha dejado permear por los “amiguismos”, dejando puestos públicos en manos equivocadas, y consideramos que esta situación es notoria en redes sociales y medios de comunicación locales; no obstante, este último grupo se ha dedicado a realizar un trabajo de responsabilidad con la comunidad, ya que aparte de exponer lo anteriormente descrito, han denunciado diferentes problemáticas, como lo son: la inseguridad, el cuidado de nuestra malla vial, alumbrado público, aseo, acueducto, entre otros. Sin embargo, aquí nos centraremos en hablar de lo sucedido en los últimos días frente a la caída de árboles.
¿De quién es la culpa?
Hace unos años, se dio a conocer que la Secretaría de Desarrollo Agropecuario de la antigua administración municipal realizó el levantamiento de un catastro de árboles, el cual se encontraba contenido en el Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos (PGIRS); allí, debe reposar: ubicación, especie, altura, entre otras características y cantidad de veces a podar de cada árbol encontrado en el municipio en espacio público. Sin embargo, esta labor jamás se concluyó pues la tarifa de aseo tendría una significativa variación.
Es importante recordar que la antigua empresa ejerció presión para que dicho documento se realizara, hasta que se logró. Irrefutablemente, en la actualidad las empresas de aseo están en la constante búsqueda de aceptación por parte de la administración municipal, para evitar mayores inconvenientes en el escenario de libre competencia; razón que los ha llevado a sostener reuniones con secretarios y delegados (Este último, como alternativa cuando el alcalde y sus secretarios “no pueden” asistir), lo que ha conllevado a una falta de seriedad para la ejecución de dicho documento que es obligatorio a nivel nacional.
Cada día que pasa, la comunidad se niega a pagar las amplias tarifas de aseo que incrementan constantemente y por eso se pasan de operador, como si se tratase de un tema de telefonía, en donde el servicio pasa por un cable, pero al tener dos o tres operadores en un solo barrio trae a la larga desorden, problemas comunitarios, plagas, etc, bueno, ese es otro tema, el punto es, que lastimosamente las tarifas se encuentran reguladas y avaladas a nivel nacional, y que el bolsillo de la comunidad no soporta más, y si se cobra lo que corresponde por la poda de los árboles la tarifa sería aún mayor. Esto no le conviene, ni a la administración, ni a las empresas de aseo, por eso se han quedado suspendidos con la ejecución total del PGIRS.
Los individuos arbóreos que cayeron esta semana, son producto del tremendo descuido en el que se encuentra nuestro municipio al no cumplir con la reglamentación nacional. Esto se habría prevenido, sí el catastro estuviera completo, los árboles estuvieran marcados, las empresas de aseo ya hubieran repartido la cantidad de árboles a podar y si la comunidad supiera a cabalidad la información del tema de facturación.
Aquí, querido lector, Usted debe analizar quién tiene la responsabilidad de todo lo que está pasando en este municipio o a quién debemos agradecer el hecho de que los árboles no cayeran sobre una casa, un carro o una persona.
Frente a este artículo, podrán justificar que la caída de los árboles fue producto de la remoción de tierra que genera la lluvia, pero el peso y la altitud también son un indicador para que cosas así sucedan; también van a decir que este no es el único municipio que cuenta con estas problemáticas, pero cada alcalde debe hacerse cargo de su municipio, sin hacer comparaciones absurdas defendiendo su falta de gestión y la falta de proactividad de su equipo de trabajo. En conclusión, la culpa es, ¿de la alcaldía y sus dependencias¡? ¿De la comunidad? ¿De las empresas de aseo? O simplemente hay una responsabilidad compartida.
Los temas del PGIRS no acaban
No solamente la problemática de los árboles nos toca, también tenemos una situación generada por los habitantes de calle, los recicladores formalizados y no, que realizan su labor en todo el municipio. Por un lado, tenemos a un grupo de recuperadores que se encuentran formalizados, pero no sabemos si están censados por parte de la Secretaría de Desarrollo Económico, pero sí están cobrando esta actividad en la tarifa de aseo y no tienen una ruta específica para alcanzar a todo el municipio, es decir, si a Usted le cobran el componente de aprovechamiento y a su barrio no van a realizar esta actividad, puede denunciar o quejarse con las entidades encargadas en el municipio, como lo es la Liga del Consumidor.
Pero la situación no concluye allí, ya que también la Secretaría de Desarrollo Social debe hacer la caracterización de los habitantes de calle, y son los que en una gran proporción rompen bolsas y dejan regueros]; sin embargo, la comunidad como responsabilidad debe realizar la separación de los residuos, pero esto no pasa en todos los barrios.
Así mismo, las empresas de aseo muestran su proactividad a través de campañas para sensibilizar a la comunidad, pero este trabajo se ha revertido porque la comunidad cansada de los regueros acude a la empresa de aseo para poner en cintura a los infractores, a los que hacen reguero, sin darse cuenta de que ellos no pueden hacer nada, ya que es la policía ambiental que debe hacerse cargo. Pero en este municipio, las entidades no cumplen con la labor que deben desempeñar y la comunidad no conoce cuántos comparendos ambientales se han impuesto en este municipio.
Ahora bien, si hay empresas que realizan el aprovechamiento en Facatativá al menos ¿cumplen con la normatividad para que se encuentren cobrando el incentivo en la tarifa a la comunidad?