En Facatativá, el microtráfico y la delincuencia reyes absolutos de la ciudad

En el último reporte de la Gobernación de Cundinamarca, dejó muy mal situado al municipio de Facatativá en temas relacionados con el microtráfico y la delincuencia, el cuál aparece entre los once (11) municipios con mayor distribución de estupefacientes.

De acuerdo al informe, los lugares con más ventas de alucinógenos con alta incidencia de delitos, son los parques, zonas comerciales, discotecas, colegios entre otros lugares como carrileras y vías principales; lugares que debieran estar custodiados por la policía y la Alcaldía, pero no lo están.

El informe dice que el consumo y la venta de estupefacientes se han convertido en un silencioso pero creciente problema de la ciudad, al que no es fácil hacerle seguimiento, sin embargo, las redes sociales evidencian a diario, el grave problema del microtráfico y la perturbación que hace dentro de la sociedad, especialmente entre los niños y jóvenes.

Los residentes denuncian que la alcaldía de Guillermo Aldana Dimas no logró enfrentar el problema y se dedicó a tapar huecos con otros huecos. La percepción de inseguridad es creciente, ya que los facatativeños temen salir a las calles o lugares públicos por temor a ser atrapados por la delincuencia.

En Facatativá, las sustancias alucinógenas más usadas son la marihuana, el bazuco, la cocaína y sus derivados, lo anterior genera delitos de todo tipo que prolifera en toda la ciudad, sin importar la hora o la condición misma de las víctimas.

Es increíble que el alcalde siendo médico, no haya podido buscar soluciones a través de programas sociales directamente en las instituciones educativas. Según los habitantes, los crímenes que más se registran son: hurto callejero, hurto a residencias, robo de bicicletas, celulares, vehículos,  motos , extorsión y homicidios de modo sicarial relacionados con microtráfico. 

Agregan los habitantes que la reacción de las autoridades es lenta y que el liderazgo de la administración para enfrentar la inseguridad, jamás se sintió. Lamentable situación de una gran ciudad, donde sus dirigentes improvisaron soluciones, cediendo terrenos al hampa y al tráfico de alcaloides.

Otros municipios de Cundinamarca también están siendo afectados por esta problemática donde se resalta Soacha, Zipaquirá, Fusagasugá, Facatativá, Girardot, Chía, Madrid, Tocancipá, Guaduas y Mosquera.

Según el Periódico Q’hubo la Gobernación de Cundinamarca, ”Se trata de mercados ilegales a los cuales no es fácil hacerles un seguimiento, y en la actualidad no se cuenta con un estudio serio al respecto. Pero la Fuerza Pública viene adelantando acciones en todo el territorio con el fin de atacar dichos comercios de drogas, logrando incautaciones en los municipios y en los corredores viales”.

A pesar de que no es una problemática fácil de afrontar, las autoridades trabajan para hacerle frente a la crítica situación que se ha venido presentando en los municipios vecinos a la capital.

La Gobernación de Cundinamarca también manifestó que entre el 2021 y el 2022 se desmantelaron 22 organizaciones criminales y la captura y judicialización de 165 de sus integrantes, a través del programa de recompensas, de la colaboración de la ciudadanía y por acción de la Fuerza Pública. También fueron ocupados cuatro inmuebles, se capturaron 1.432 expendedores y desmantelados seis laboratorios o cristalizaderos de cocaína.

Fuentes de información y textos Periódico El Tiempo, Periódico Q’hubo y Portal de Noticias Jairo Veloza González

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